Sobre el divorcio.

1. Mateo 5, 31-32

31 También se dijo: «El que se divorcia de su mujer, debe darle una declaración de divorcio».

32 Pero yo les digo: El que se divorcia de su mujer, excepto en caso de unión ilegal, la expone a cometer adulterio; y el que se casa con una mujer abandonada por su marido, comete adulterio.

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2. Mateo 19, 3-9

3 Se acercaron a él algunos fariseos y, para ponerlo a prueba, le dijeron: «¿Es lícito al hombre divorciarse de su mujer por cualquier motivo?».

4 El respondió: «¿No han leído ustedes que el Creador, desde el principio, los hizo varón y mujer;

5 y que dijo: «Por eso, el hombre dejará a su padre y a su madre para unirse a su mujer, y los dos no serán sino una sola carne»?

6 De manera que ya no son dos, sino una sola carne. Que el hombre no separe lo que Dios ha unido».

7 Le replicaron: «Entonces, ¿por qué Moisés prescribió entregar una declaración de divorcio cuando uno se separa?».

8 El les dijo: «Moisés les permitió divorciarse de su mujer, debido a la dureza del corazón de ustedes, pero al principio no era sí.

9 Por lo tanto, yo les digo: El que se divorcia de su mujer, a no ser en caso de unión ilegal, y se casa con otra, comete adulterio».

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3. Marcos 10, 2-12

2 Se acercaron algunos fariseos y, para ponerlo a prueba, le plantearon esta cuestión: «¿Es lícito al hombre divorciarse de su mujer?».

3 El les respondió: «¿Qué es lo que Moisés les ha ordenado?».

4 Ellos dijeron: «Moisés permitió redactar una declaración de divorcio y separarse de ella».

5 Entonces Jesús les respondió: «Si Moisés les dio esta prescripción fue debido a la dureza del corazón de ustedes.

6 Pero desde el principio de la creación, Dios los hizo varón y mujer.

7 Por eso, el hombre dejará a su padre y a su madre.

8 y los dos no serán sino una sola carne. De manera que ya no son dos, sino una sola carne.

9 Que el hombre no separe lo que Dios ha unido».

10 Cuando regresaron a la casa, los discípulos le volvieron a preguntar sobre esto.

11 El les dijo: «El que se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra aquella;

12 y si una mujer se divorcia de su marido y se casa con otro, también comete adulterio».

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4. Lucas 16, 18

18 El que se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio, y el que se casa con una mujer abandonada por su marido, comete adulterio.

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5. 1 Corintios 7, 10-15

10 A los casados, en cambio, les ordeno –y esto no es mandamiento mío, sino del Señor– que la esposa no se separe de su marido.

11 Si se separa, que no vuelva a casarse, o que se reconcilie con su esposo. Y que tampoco el marido abandone a su mujer.

12 En cuanto a las otras preguntas, les digo yo, no el Señor: Si un hombre creyente tiene una esposa que no cree, pero ella está dispuesta a convivir con él, que no la abandone.

13 Y si una mujer se encuentra en la misma condición, que tampoco se separe de su esposo.

14 Porque el marido que no tiene fe es santificado por su mujer, y la mujer que no tiene fe es santificada por el marido creyente. Si no fuera así, los hijos de ustedes serían impuros; en cambio, están santificados.

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Director proyecto Con San Pelayo.
— Luis Gonzaga Palomar Morán

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