Desviaciones de Francisco Martínez de la Rosa respecto a la verdad.

Francisco Martínez de la Rosa, como figura política destacada del liberalismo español del siglo XIX, se desvía en muchos aspectos clave de la doctrina tomista, la patrística, las encíclicas, las enseñanzas de Cristo en el Nuevo Testamento y del tradicionalismo español. A continuación se desglosa cómo y en qué medida:


1. De la doctrina tomista

La doctrina tomista, basada en Santo Tomás de Aquino, defiende una concepción orgánica de la sociedad donde la autoridad política y el orden social deben estar subordinados a la ley natural y a la ley divina. El poder proviene de Dios y tiene como fin el bien común, en un marco jerárquico y armonioso.

Desviaciones de Martínez de la Rosa:

  • Promovió un sistema racionalista y voluntarista del poder político, en el que la soberanía reside en la nación (Cortes de Cádiz), no en Dios.
  • Favoreció un modelo constitucional liberal, en el que la ley ya no es reflejo de la ley eterna sino una construcción del consenso humano.
  • Separación entre Iglesia y Estado, contraria al ideal tomista de unidad entre fe y orden político.

2. De las encíclicas anteriores al Vaticano II

Encíclicas como «Mirari Vos» (Gregorio XVI, 1832) y «Quanta Cura» junto con el «Syllabus Errorum» (Pío IX, 1864) condenan el liberalismo, el indiferentismo religioso, el laicismo y la soberanía popular.

Desviaciones:

  • Defensa del liberalismo político, condenado explícitamente en estas encíclicas como incompatible con la verdad católica.
  • Aceptación de la libertad de prensa, expresión y culto, que fueron condenadas como peligrosas para la fe y la moral.
  • Apoyo a una constitución laica que relativiza la verdad religiosa y moral.

3. De la patrística

Los Padres de la Iglesia subrayan el papel central de la Iglesia en la vida pública y la necesidad de que las leyes humanas se conformen con la ley divina.

Desviaciones:

  • Martínez de la Rosa impulsó un modelo secularizado del poder, donde la Iglesia pierde su papel dirigente en lo público.
  • Relativización de la autoridad espiritual frente al poder civil.
  • Falta de la dimensión escatológica y sacramental en su visión del orden social.

4. De lo que dice Cristo en el Nuevo Testamento

Las enseñanzas de Cristo llaman a la conversión, al Reino de Dios, a la justicia trascendente, y al reconocimiento de su autoridad divina.

Desviaciones:

  • Desvinculación del orden político del Reino de Dios.
  • En vez de regirse por la finalidad bien común y la verdad revelada, el liberalismo que Martínez de la Rosa representó tiende a hacer del consenso humano el criterio último.

5. Del tradicionalismo español

El tradicionalismo español (figuras como Donoso Cortés, Vázquez de Mella, o el carlismo) sostiene que la monarquía católica, la unidad religiosa y el principio de autoridad son esenciales para el bien de España.

Desviaciones:

  • Martínez de la Rosa fue uno de los fundadores del liberalismo español, que se opone frontalmente al tradicionalismo.
  • Promovió el parlamentarismo, que el tradicionalismo ve como una usurpación de la soberanía de Dios y una puerta a la revolución.
  • Defendió un modelo de sociedad pluralista y secular, en contraste con la visión de cristiandad del tradicionalismo.

Conclusión:

Francisco Martínez de la Rosa representa una clara ruptura con la cosmovisión católica tradicional. Se desvía en lo teológico, político y social, al propugnar un modelo de Estado moderno basado en la soberanía nacional, la constitución, los derechos individuales y la secularización, incompatibles con la doctrina cristiana tradicional expresada por Santo Tomás, la patrística, el magisterio y el legado hispánico tradicionalista.

  • Fue acusado por sectores tradicionalistas y absolutistas de estar cercano a la masonería, lo cual era común para cualquier liberal de su tiempo.
  • Simpatizaba con ideas ilustradas y liberales, muchas de las cuales coincidían con los ideales masónicos (libertad de conciencia, constitucionalismo, secularización del Estado).
  • Algunos autores del siglo XIX y XX lo han incluido en listas de masones sin documentación sólida, lo que invita a la prudencia.

Conclusión: No se puede afirmar con certeza que fue masón, aunque su ideología lo coloca dentro del ámbito ideológico afín al pensamiento masónico ilustrado.

Director proyecto Con San Pelayo.
— Luis Gonzaga Palomar Morán

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